Como todavía nos estamos conociendo voy a hablaros de mis imprescindibles para estudiar.

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Ya os dije que la filosofía de opositobonito son los cuadernos en tono pastel, los bolígrafos rosas, los lápices de corazones y un largo etc.

 

Comprenderéis que es casi imposible elegir algo dentro de este mundo tan maravilloso que es la papelería, mundo al que pertenece opositabonito, pero haciendo un esfuerzo os voy a contar y mostrar cuáles son esas cosas que nunca pueden faltar en mi escritorio, y que convierten esa mesa en mi templo.

 

• Pegatinas: os puede parecer incluso absurdo, pero siento verdadera adicción por las pegatinas, en especial por las pegatinas diseñadas para la agenda, o para los apuntes, las pegatinas con mensajes útiles para recordar lo importante, la reunión, o las cañas con amigas, pero es tal en amor que siento por estos diminutos trozos de papel con adhesivo que las tengo de todas las formas y colores, y a veces tengo la necesidad de comprarlas repetidas, porque me da hasta pena utilizarlas. ¿Os pasa a vosotros?
  Os muestro en fotos algunas de las que tengo y os dejo links de donde podéis conseguir stickers maravillosos ya que alguna vez me habéis preguntado donde comprarlas.

 

•  Agenda: este es sin duda mi objeto fetiche por excelencia, me ha ocurrido alguna vez que en un mismo año he tenido tres o cuatro agendas diferentes. Normalmente me gusta tener una agenda enorme que siempre dejo en el escritorio y que utilizo a modo de planificador donde organizo cada día hora por hora, y me gusta tener otra más pequeña que llevar en el bolso, por si tengo que apuntar algo y me encuentro fuera del opozulo, o sencillamente para anotar todo lo que no tiene que ver con la oposición.
  
  Tengo muchas manías a este respecto, y una de ellas es no mezclar en mi agenda de escritorio nada que no tenga que ver con la opo.
   

• La taza de chocolate caliente: esto es una manía de temporada. Claro, en pleno agosto no es lo que más me apetece, pero en invierno, ay en invierno…cuando las hojas de los árboles se caen, y sobre todo, cuando empiezan a sonar los primeros villancicos, en mi escritorio siempre encontraréis una tacita llena de ese brebaje que me recarga las pilas a tope, y no, no es postureo, lo necesito como otros necesitan un café a medio día.

 

• Por último en mi escritorio nunca falta una amplia variedad de bolígrafos preciosos, siento especial predilección por los bolígrafos y por el material específico de opositores (pronto hablaremos de alguna tienda maravillosa donde comprarlos y de las que soy muy fan). Esto es algo que me pasa desde el colegio, siempre he odiado escribir con el típico Bic, Pilot etc, aunque como todos también los utilizo, no se puede ser tan estirada.
  
  Lo cierto es que no soy una persona que emplee cincuenta colores para sus apuntes, escribo fundamentalmente en azul, y de vez en cuando en negro, pero desde luego en mi estuche hay todas las tonalidades posibles, y en este caso podemos decir que juzgo el libro por las tapas, pues tengo bolígrafos muy bonitos, y muy incómodos.

¿Y vosotros? ¿tenéis algún imprescindible en vuestro escritorio?